En la mañana de ayer me desplacé a Cáceres para mantener una entrevista con alguien importante del Organismo Autónomo de Recaudación y Gestión tributaria para darle a conocer mi malestar debido a los fallos en el cobro de atrasos a las bajas catastrales, aquellas referencias que quedan absorbidas por las actuales, y se me aclaró que el problema ha sido generado por la base de datos y la aplicación informática de la Dirección General del Catastro. Se me ha garantizado personalmente que este fallo será subsanado lo más pronto posible. Asimismo quería saber si el cobro de atrasos con cargo directo en cuenta es lo normal y se me respondió que era el procedimiento cuando los usuarios tienen domiciliado el recibo del catastro. Aprovechando mi visita a la capital provincial, entregué copia escrita de unas cuestiones relacionadas con la actualización catastral en el servicio de asesoramiento a municipios en su oficina del centro de la ciudad. Y por último me dirigí a la oficina de la Diputada de Cultura para entregar la documentación necesaria del borrador de un nuevo libro sobre Valdeobispo que espero que la comisión de lectura, encargada de analizarlo, acceda a su publicación.
Después era el turno de acudir nuevamente a Mérida con importante documentación bajo el brazo. En esta ocasión, la visita se rindió a las oficinas del SEPAD de la Consejería de Sanidad y Dependencia para entregar el informe previo a la autorización de apertura del centro residencial de nuestro pueblo. Durante esta semana se está procediendo a pintar las fachadas así como algunos interiores afectados por la reforma efectuada. Y para finalizar, el tiempo me permitió mantener una tensa reunión con el D.General de Deportes en su despacho para tratar el tema de los retrasos en la ejecución de la cubierta del pabellón polideportivo municipal.
No hay descanso...
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