Hace una semana...
Fueron tan solo tres minutos, poder volver a cruzar esa puerta para asomarse tan solo a saludarles a ustedes, sin entrar en el recibidor por razones más que obvias (aún no estoy vacunado). Esas caritas que llevamos sin ver por espacio de muchos meses que han permanecido encerrad@s, soportando el paso de los días por culpa de un enemigo invisible. Tienen que contarnos qué han estado haciendo, hacia dónde volaron con su imaginación. La fuerza de voluntad, la salud y la misma vida, se abrieron paso. Les retiramos las vallas del jardín acotado y aquel lugar deja de parecerse a una cárcel, las visitas vuelven a realizarse y el sol, que siempre ha vuelto cada mañana de este largo tiempo, señala una nueva esperanza. Ustedes, sí, héroes de muchas batallas, que habitan nuestra residencia de mayores de Valdeobispo.
Gracias a las personas que los cuidan, por su trabajo y esfuerzo.
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