Entrevista digital

Óscar Alcón Granado nos cuenta su experiencia al frente del Ayuntamiento de Valdeobispo.

Nombre y apellidos: Óscar Alcón Granado 

Edad: 40 años. 

Profesión: Oficial de actividades técnicas de la Confederación Hidrográfica del Tajo. 

Situación familiar: Casado y padre de dos hijos. 

¿Cómo es la gestión municipal en su pueblo?  

Desde el año 2007 ha pasado tiempo suficiente para darse cuenta de que el concepto de igualdad es la regla básica del funcionamiento municipal. Tratamos de impulsar mejoras para que Valdeobispo recupere pulso dentro de la comarca y podamos llegar a lograr un estado de bienestar suficiente para que nuestros jóvenes y mayores se queden a vivir aquí. Hablar de nuestro pueblo es poner negro sobre blanco que necesitamos mantener nuestros servicios e infraestructuras municipales para seguir creciendo. Nuestra gestión municipal parte de la premisa basada en que tenemos que hacer política a pie de calle y tomar decisiones para paliar y/o solucionar problemas diarios. 

Nos gusta mantener contacto e interlocución directa con nuestros vecinos y escuchar el doble de lo que hablamos. Prueba de ello es que muchas de las obras o decisiones que tomamos se amparan en las opiniones que ellos mismos nos transmiten.  

Contamos siempre con la colaboración de los colectivos vecinales que aportan una gran labor y esfuerzo común en todas y cada una de sus intervenciones. Aplicamos el sentido común a la vida de nuestro pueblo.  

Lo mejor y lo peor de estos 4 años de legislatura.  

Durante esta legislatura que ahora termina hubo un momento se satisfacción enorme cuando se puso en marcha el nuevo sistema de captación, potabilización y transporte de agua potable hasta Valdeobispo desde el embalse del mismo nombre. Es el proyecto más importante de este pueblo en toda su historia. Superados los problemas iniciales, desde marzo de 2014 disfrutamos del mejor agua de la comarca en nuestros grifos. Es una realidad comprobable. Han sucedido otros momentos no menos importantes como la entrega de la promoción de viviendas de promoción pública, las primeras en la historia de este pueblo, o la apertura de la residencia de mayores tras la reforma integral del edificio construido en 1996 y que se encontraba cerrado durante más de una década. Momentos malos han sido muchos. Resaltaría la no respuesta de cada una de las consejerías a las humildes propuestas que desde el gobierno municipal hemos venido haciendo en estos cuatro años. Fomento, deportes y cultura no nos han escuchado. Y en esta región, los pequeños municipios somos casi nada sin la ayuda del resto de las administraciones públicas. Además, haber tenido que hacer frente a la tasa Monago o la implantación de la Ley de Racionalización para las administraciones públicas, famoso déficit cero, que ha hecho que los municipios que cumplían con sus obligaciones se vean perjudicados a la hora de la gestión municipal de sus recursos. No se puede culpar del déficit público a los pueblos pequeños. 

Nuestra red de comunicaciones por carretera es mejorable y necesitamos que la administración provincial tome cartas en el asunto.  

¿Qué necesita tu pueblo?  

Que no se nos engañe más tiempo para conseguir un plan general municipal que llevamos esperando mucho tiempo. El documento que obra en manos de la Junta de Extremadura es un “trágala” infumable. No sirve para nada porque no se puede aplicar. 

Nuestro municipio necesita asentarse, una vez se terminen los proyectos que están iniciados. Renovación de redes de agua potable, piscina municipal, hogar de mayores y almacén municipal. Además, claro está que el Ayuntamiento es el principal impulsor de iniciativas de empleo y generación de recursos, necesitamos que las administraciones provincial y regional pongan en marcha medidas que impulsen políticas sociales, que no nos priven de ninguna de las bazas para seguir sobreviviendo. Sumemos a ello las políticas que se vienen realizando por este gobierno, con empleo para todos, atención al ciudadano con igualdad y protección de servicios sociales y asistenciales.  

A nivel general, necesitamos una ley de financiación local de manera urgente.  

¿Qué esperas del futuro político de tu pueblo, la provincia y la región?  

En cuanto a Valdeobispo, esperamos seguir gobernando en la próxima legislatura para poder seguir impulsando el inmenso trabajo que desde 2007 venimos realizando mis compañer@s y yo. Es necesario ahondar en las necesidades de este municipio y redoblar esfuerzos en esta época de crisis para hacer de nuestro pueblo el lugar que siempre quisimos que fuera. 

Un cambio de gobierno provincial traería acarreada una mayor atención al entorno rural, políticas de impulso al empleo, protección social y desarrollo de los pequeños municipios, olvidados por el actual gobierno. 

En cuanto a la región, espero que nuestros futuros gobernantes se duchen a diario de realismo y conozcan que nuestra lucha es su lucha, que Extremadura es fundamentalmente rural y que nuestra calidad de vida es un patrimonio inmaterial a preservar y potenciar. No se puede seguir otros cuatro años más bajo el yugo de políticos de propaganda y pandereta que solo se preocupan del marketing. 

En general, tanto en la provincia como en la región se nos ha menospreciado por culpa del color político del gobierno municipal. Nuestros vecinos no se merecen semejante trato ni discriminación.  

¿Qué debe hacer el PSOE si gana  las elecciones?

Sentarse en todos y cada uno de los municipios frente a los vecinos y ciudadanos que deseen participar y evaluar de manera concienzuda las prioridades básicas a impulsar. Estamos en un tiempo en el que la ciudadanía necesita creer en nosotros y debemos ser claros, directos, cercanos y contundentes. Fomentar la participación social es necesario. 

Por supuesto, derogar impuestos abusivos como la Tasa Monago y abogar por la total transparencia en la gestión. Devolver a los municipios la parte de la independencia en la gestión que necesitan y aumentar el control para evitar los desmanes de los gobernantes de turno. 

En definitiva, impulsar políticas que hagan crecer a Extremadura, para que nuestros jóvenes puedan buscarse la vida aquí y consigamos generar la riqueza que nos hace falta.