El lunes por la tarde estuvimos en la reunión de cargos públicos y responsables municipales convocada por el Instituto de la Juventud de Extremadura en la factoría joven de Plasencia. Siempre es agradable reencontrarse con compañeros y compañeras alcaldes y alcaldesas de uno y otro signo político para hablar sobre nuestros jóvenes, sus preocupaciones, sus proyectos, sus problemas y qué soluciones podemos ofrecer al futuro de nuestra sociedad, que son ellos. La verdad es que el panorama es complicado, hay desasosiego, desesperanza y desmotivación ante la falta de oportunidades.
Desde el gobierno regional se sigue elaborando el Plan de Juventud que verá la luz a finales de año. De las conclusiones del mismo, espero que se diseñen actuaciones que nos ayuden a que nuestros jóvenes amplíen el abanico de posibilidades para el presente y el futuro. Necesitamos también que no abandonen nuestros pueblos y que vuelvan los que se fueron. Para ello, la administración pública ha de poner a disposición los recursos necesarios en el territorio y una buena idea es que comiencen a hacerlo por las mancomunidades que agrupan a municipios.
Veremos qué sale...
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