sábado, 3 de diciembre de 2011

Municipalismo

Hace cuatro años no pude asistir a la asamblea general de la Federación Extremeña de Municipios y Provincias (FEMPEX) debido a problemas de trabajo. En esta séptima edición estuve presente junto a compañeros alcaldes de toda la región para dar fe de que los pueblos de Extremadura pueden y deben estar unidos en lo esencial, la lucha por metas y deseos comunes que nos afectan a todos y que repercuten de manera directa en nuestros vecinos. Como siempre, fue una buena oportunidad para ver y saludar a todos aquellos que nos dedicamos a trabajar en el sector público o político y contrastar ideas, experiencias, proyectos e inquietudes de cara al futuro teniendo como base la unidad en la búsqueda de soluciones al desempleo y la preservación de servicios sociales esenciales. En esta reunión se aprobó un ramillete de propuestas importante para los municipios si bien se echa de menos abordar de una vez por todas una ley de financiación local integral que dote de recursos y que transfiera competencias a las entidades locales de forma proporcional. Además, se dio paso a la renovación de los cargos y vocalías como es preceptivo al final de cada mandato. Buenas conclusiones para finalizar la mañana si bien, quien debe esperar a los extremeños y estar a su servicio, llegó tarde para gozar de nuestra presencia. Quizá la próxima vez sea posible. Mi enhorabuena personal al nuevo presidente de la FEMPEX, D. Fernando Pizarro García-Polo, Alcalde de Plasencia, así como al resto de alcaldes miembros de la nueva ejecutiva de este organismo.

Y como quedaba jornada suficiente, en la tarde de ayer se celebró sesión plenaria en la Mancomunidad para adoptar una decisión definitiva sobre el convenio de financiación de la OGU (oficina de gestión urbanística) para lo que a pesar del buen servicio que prestaba a Valdeobispo, nos vemos obligados a prescindir y no suscribir el documento en los términos y cantidades que se proponen al suponer un gran desembolso económico que la inmensa mayoría de ayuntamientos no está dispuesto a realizar. Esta decisión supone un importante paso atrás en el desarrollo local integrado de nuestra comarca aunque ya era inaceptable el propio convenio en si. No se puede pasar de un coste cero a tener que financiar un 45%, por mucho que lo diga nuestro gobierno autonómico.

Una de cal y otra de arena...

3 comentarios:

  1. Oscar alguno te acusará de no querer ayudar en tiempos difíciles pero como dice alguien muy conocido, es de sentido común, no se puede aceptar lo inacepable. Muchas gracias por tu trabajo, un abrazo.

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  2. Nos pesa la decisión porque implica la pérdida de un importante servicio público y la destrucción de seis empleos pero tenemos que establecer prioridades y lo mejor sería que encima de nuestra mesa se nos mostraran todos los convenios que haya que firmar en estos cuatro años con sus respectivos recortes. Pero claro, eso es mucho pedir para quien ahora lleva las riendas...

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  3. EL "GOBIERNO DE EXTREMADURA" NOS PIDE QUE, EN TIEMPOS DE CRISIS, FINANCIEMOS UN SERVICIO SUYO PROPIO CON LOS DINEROS DE NUESTROS VECINOS Y ESO NINGÚN ALCALDE QUE QUIERA DEFENDER LOS INTERESES DE SU PUEBLO PUEDE NI DEBE ASUMIR, SIMPLEMENTE PORQUE NOS TOCA PRIORIZAR, Y ESO ES LO QUE HEMOS HECHO.NO DEBEMOS SENTIRNOS MAL POR ELLO. HICIMOS LO QUE HABIA QUE HACER SIN MAS. SALUDOS

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