En esta mañana tras la resaca producida por el cansancio de la jornada de domingo, los resultados evidencian cambios significativos a tener en cuenta. Desde estas líneas me gustaría dar mi enhorabuena al PP-EU de Extremadura y hacerlo extensivo a la formación política a nivel nacional. Mariano Rajoy será presidente del gobierno en esta difícil y complicada legislatura. Las urnas le han legitimado para gobernar con mayoría absoluta si bien en sus intervenciones posteriores al escrutinio de ayer llamó varias veces al consenso y entendimiento, gesto que le honra.
Por otra parte, la lectura que podemos sacar en esta convocatoria es la de que hemos tocado fondo y que desde ese sitio, hemos de construir una oposición responsable, crítica y que vele por los intereses de los ciudadanos de este país en general. Ahora mismo ya no existe el hilo directo que en su día conseguimos aunando gobierno local, provincial, regional y nacional. Ya no estará Zapatero, ni Vara, ni Tovar, ni ningún compañero afín en el poder. Solo nos quedan las alcaldías para hacer entender que España se parece mucho más a lo que dicta nuestro ideario que a la situación actual. Pero los ciudadanos libre y voluntariamente han decidido con su voto por lo que quiero dar las gracias a aquellos que nos apoyaron y también a los que no lo hicieron pues al menos, decidieron participar con la que estaba cayendo.
Hemos de revisar nuestra situación, repensar nuestras estrategias, nuestras metas y los contextos en los que nos tocará trabajar de aquí en adelante. A un gran desplome, una buena y eficaz reconstrucción.
Deseo suerte al nuevo equipo de gobierno en su tarea de cambiar el rumbo, superar esta crisis y salir a flote pidiéndoles además que no seamos los de siempre los que paguemos los platos rotos.
Ánimo y adelante...
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